Francisco Medina no logró que se aprobara en el Concejo Deliberante la
paralización de las obra de la planta de fertilizantes de la empresa Pierdoce
S.A. en los giros 11 y 12 de Puerto Quequén.
La iniciativa fue presentada en la última sesión ordinaria, decidiéndose por
mayoría el pase a las comisiones de trabajo correspondientes de ese organismo.
El edil que ahora se declara “vecinalista” propuso que la continuidad de la
obra esté supeditada a que “el OPDS (Organismo Provincial para el Desarrollo
Sustentable) se expida acerca de los datos recogidos en su última visita”.
Medina consideró que “la
magnitud y relevancia del proyecto en cuestión y las potenciales consecuencias
para la seguridad, la salud y la vida de los habitantes del distrito, así como
de la fauna y flora de la región generan preocupación en la población y la
falta de información acrecienta la incertidumbre”.
"Pedí al cuerpo de concejales
la paralización de la obra y esto no fue por una cuestión caprichosa, sino que
hasta ahora solo hemos tenido la voz de una de las partes interesadas que es
Pierdoce S.A. pero necesitamos la voz autorizada de un ente de contralor como
es OPDS para llevar tranquilidad a todos los vecinos" señaló
Medina.
Desde el área de medio ambiente del Consorcio de Gestión de Puerto
Quequén, el ingeniero Martín Bruno, ha
venido recalcando que la instalación de esta planta no resulta peligrosa para
la población, asegurando que no se manipulará nitrato de amonio sólido y
agregando que a las indicaciones del
OPDS se les va dando cumplimiento por etapas, en forma progresiva.
También el coordinador económico del organismo, Fernando Ciancaglini, al
exponer ante los miembros de la comisión de medio ambiente del Concejo
Deliberante aseguró que se trata de material “no peligroso” el que será operado
en esa planta.